“En la nueva plaza pública de las redes, el silencio no es neutral: es la rendición.”
Introducción
En el contexto actual de lucha por el dominio del discurso digital, los regidores panistas de Querétaro han cometido un error estratégico fundamental: el silencio. La política, como el ajedrez, es un juego de anticipación y control de la narrativa. Quien no comunica, pierde. Sin embargo, los regidores del Partido Acción Nacional (PAN) han optado por una estrategia de bajo perfil en redes sociales, dejando un vacío discursivo que ha sido aprovechado por sus adversarios.
Esta crisis de comunicación no es solo el resultado de una falta de recursos o capacitación digital, sino de una cultura política que sigue aferrada a modelos tradicionales de gestión del poder. Durante años, el PAN ha dominado Querétaro con una política de proximidad basada en estructuras territoriales y relaciones con sectores empresariales. Sin embargo, el nuevo campo de batalla es el digital, donde la conversación pública ya no es controlada por los medios convencionales, sino por el algoritmo (Monedero, 2023).
Como lo señala Monedero (2023) en La izquierda que asaltó el algoritmo, la política del siglo XXI ya no se juega en mítines ni en oficinas gubernamentales, sino en el ecosistema de las redes sociales. En este contexto, el silencio no es una opción viable; es, en términos estratégicos, un suicidio político.
Métricas de la Derrota Digital
El fracaso de los regidores panistas no es solo una percepción subjetiva; los datos lo confirman. Mientras el regidor Fernando Flores, conocido como “Avse”, ha logrado posicionar su discurso con una proporción de menciones 100 a 1 frente a los regidores panistas, estos últimos han quedado atrapados en un estado de irrelevancia digital.
El análisis de la conversación digital mediante herramientas de escucha social y analítica avanzada indica que los regidores del PAN han perdido el control del discurso público. Su ausencia en redes ha permitido que la oposición moldee la percepción ciudadana, estableciendo un relato en el que el PAN es presentado como un partido desconectado, incapaz de responder a las preocupaciones sociales.
En este escenario, los algoritmos operan como jueces imparciales que amplifican los mensajes con mayor interacción y relevancia. Como señalan González y Ramírez (2021), los políticos que no participan activamente en el entorno digital ceden espacio a sus adversarios, permitiendo que la narrativa contraria se imponga sin resistencia.
La Necesidad de una Estrategia Transmedia
El ajedrez político exige previsión, estrategia y capacidad de respuesta ágil. En el tablero digital, los regidores panistas han jugado como si la política siguiera siendo un duelo de piezas estáticas, cuando en realidad se ha convertido en un juego dinámico de múltiples plataformas interconectadas.
La falta de una estrategia transmedia efectiva ha sido su mayor debilidad. Como explica González (2020) en El shock del escándalo político, en la era transmedia, la política no solo debe contar historias, sino hacerlo a través de diversos formatos y plataformas, construyendo una narrativa omnipresente que permita disputar el poder en cada espacio de conversación.
El caso de Avse demuestra que una estrategia digital bien ejecutada puede erosionar el poder incluso de un partido hegemónico. Su éxito no se basa en recursos económicos, sino en la capacidad de interpretar el momento político y conectar con la ciudadanía a través de una narrativa que combina denuncia, artivismo y emocionalidad.
Conclusión: Renovarse o Morir en 2027
Los regidores panistas de Querétaro enfrentan un dilema existencial: adaptarse a las nuevas reglas del juego digital o resignarse a una derrota inevitable en 2027. Su crisis de comunicación es solo un síntoma de un problema más profundo dentro del PAN: la incapacidad del partido para construir nuevos cuadros y desarrollar una narrativa política efectiva en la era de la ciberpolítica.
La política del futuro ya no se decidirá en mesas de negociación o estructuras partidistas tradicionales, sino en el terreno digital. Como argumenta Castells (2022), en la era de la información, los líderes que dominen el algoritmo y las emociones colectivas serán quienes conquisten el poder.
Si los regidores panistas quieren sobrevivir políticamente, deben abandonar el silencio y articular una estrategia que les permita disputar el relato. De lo contrario, su destino será el mismo que el de otros partidos que, por aferrarse a un modelo caduco, terminaron desvaneciéndose en la irrelevancia y entregando el poder.
Comentarios
Publicar un comentario